El sábado pasado, como dije, acudí al acto de conmemoración del X aniversario de Asturlinux. Fue muy interesante. Me perdí los últimos minutos, pero en fin. Eso sí, aunque la cosa fue muy positiva, hay algunos peros, que diré enseguida.
La primera charla, en la que se rememoró el origen de la asociación y su actividad durante estos 10 años, fue entretenida e interesante, y además proyectaron millones de fotos de sus actividades. En algunas... hasta salía yo. Me quedé con las ganas de saber detalles sobre alguna que otra alusión que hubo a un acto en el que participamos juntos hace tiempo, pero ya me enteraré.
Luego, Iván Frade habló de Maemo. Y además de resultar muy interesante lo que dijo, me quedé impresionado de ver a alguien de por aquí que está trabajando en Nokia (sí, en Finlandia mismo) hablar de manera tan solvente. Lo que me confirma que no somos menos que nadie.
Y luego Rodrigo Salvador habló de cómo la Junta de Andalucía gestiona cientos de miles de ordenadores en los centros educativos, con software libre. Y en la mesa redonda posterior, además de Rodrigo estaban María América (directora general de Informática del Principado de Asturias y antigua compañera mía de clase), Darío, José Luis Redrejo (de la Junta de Extremadura y uno de los culpables de LinEx), Agustín Orviz, de Telecable, Eduardo Álvarez de la Fundación CTIC y Andrés Gómez, de Igalia.
Me quedé con las ganas de preguntarles cosas a todos. No es una manera de hablar; todos. Pero el tiempo que había era el que había, y el interés del público grande, y mucha gente con ganas de intervenir así que me quedé con las ganas de decir algunas cosas, y supongo que este es el sitio.
En primer lugar, Redrejo (al que admiro sin reservas) dijo que el principal problema que tenían para la implantación del software libre en la administración eran precisamente los informáticos, no el resto de funcionarios. Y no lo podía entender, cuando se supone que deberían ser gente preparada para el cambio, y todos esos etcéteras.
A mí me parece una generalización más injusta aún que la que se hace con los funcionarios (y Redrejo lo es), o con los profesores (y Redrejo lo es). Pero la explicación no es tan complicada. Los informáticos no siempre son (no sé en Extremadura) los que están en mejor situación dentro de una organización, eso en primer lugar. Suelen estar en sótanos o buhardillas, mal considerados, y siempre tienen la culpa de todo lo que falla (y rara vez el reconocimiento por lo que funciona). He visto cómo mi médico, que había rellenado mal un parte de alta (no puso... la fecha de alta), cuando tuve que volver para que me lo hiciera otra vez, me explicaba que había sido "un fallo informático". Me apetecía decirle: "Mira, chorvo, que tú no teclees una fecha no es un fallo informático. El fallo es tanto de tu ordenador como de tu bata o de tu mesa. Y los partes no los rellena tu bata."
Cuando a un informático responsable de que las cosas funcionen le propones que cambie los sistemas, en virtud de una iniciativa que da buena imagen política (vale, en este caso, además, ¡funciona, sí!), pero para la que probablemente nadie le ha consultado, aplicará el primer principio sagrado de la ingeniería: si funciona, no lo toques. Bastantes problemas tiene ya, bastantes marrones, y no tiene ganas de arriesgarse a poner todo patas arriba. Porque de lo que falle, la culpa será suya. Aunque le guste mucho la modernidad y trastear con cacharros.
A esto hay que sumar que Linux no siempre ha sido lo fiable o fácil de usar que es ahora (no nos vendáis motos, que algunos lo hemos probado), y es cierto que quizás no tenga un conocimiento actualizado del tema, pero puede que sus reservas tengan cierta base. Redrejo, habéis hecho una apuesta, os habéis jugado la cabeza, y ha salido muy bien; enhorabuena. Pero deducir, de posturas más conservadoras, que los informáticos son algo así como incompetentes o inmovilistas, me parece injusto.
Otra cosa que vino a decir Redrejo es que los informáticos que salen de la universidad están mal formados. Que no saben lo que es DHCP, o LDAP, o mil cosas (o más bien que unos lo saben y otros no, dependiendo de quién les dé clase y dónde). Y es que estoy harto de un debate tan viejo.
Yo llevo quince años dedicándome a esto, soy ingeniero y doctor... vamos, que la informática es mi vida, y soy de los que intentan aprender. He perdido la cuenta de los cursos a los que he ido y sigo yendo (estoy haciendo los papeles para otro, de hecho). Y si me ponen ahora mismo a administrar una red de mierda, no sabré. (No sabré el primer día, o la primera semana.) Seguimos con la maldita obsesión por que la gente produzca al 100% en determinado trabajo exactamente desde el primer día. Y todo el mundo tendrá su queja de que en la Universidad no se enseña nada, porque cada uno quiere una cosa en particular.
Señores: yo, si puedo pagar lo que vale algún que otro alumno que tengo en mente, primero lo ficho, y luego ya le digo a qué se va a dedicar. Me importa una mierda si las siglas que tengo yo en casa él se las sabe o no, porque sé que en una semana las devorará. Y por otro lado, es completamente imposible, y dudosamente deseable, que la Universidad produzca tipos que encajen como piezas perfectas "from day one" en el trabajo que cada departamento de cada empresa concebible imagine. Coño, ya.
En esta línea, Rodrigo decía que en las entrevistas de trabajo sólo pregunta al aspirante 5 ficheros que estén en el directorio /etc. Rodrigo: yo ahora mismo en frío no sabría decírtelos. Por tanto, no sirvo ni para coger el teléfono y dar atención de primer nivel a incidencias de usuarios en el CGA. No sé, quizás no debería dormir tranquilo, y debería aceptar que la formación que recibí en la universidad es una mierda, y la que me procuré después también... Claro, también cabe la posibilidad de que el CGA deba revisar sus políticas de contratación y formación. Pero no, es más probable que la universidad española sea una basura.
Bueno, aparte de estas cuestiones, hubo una en particular que me sorprendió sobremanera. Al parecer, la gente entusiasta del software libre no puede pronunciar "Windows".
Durante esta mañana oí de todo para evitar decir "Windows". Hombre, cuando hablaba un ponente, entendí que era una "licencia escénica" decir "el sistema de las siete letras", o cosas así; una especie de gracieta, que encabaja bien. Pero es que al hablar otros ponentes, y luego el público, vi que de verdad todos se esforzaban en no decir Windows, como si fuera un taco. Decían "si arrancas Linux o si arrancas con el otro sistema", "si usas Linux o si usas el sistema propietario", y cosas así. No, no era porque hubiera duda de si se referían a varios posibles productos propietarios. NO QUERÍAN DECIR WINDOWS. No sé si es una broma para iniciados que yo (que simpatizo con el software libre pero no soy un iniciado) no pillaba, o realmente es políticamente incorrecto decir Windows.
Por cierto, casi todos los ponentes tuvieron algunos problemillas con la presentación, porque la pantalla se apagaba a negro. Así que el que manejaba el ordenador (por cierto, un señor francamente solvente y que, encima, tenía el Linux en asturiano :-) ) lo iba arreglando, en algún caso recurriendo a software propietario (el lector de Adobe para PDFs). De acuerdo, no era nada grave, son cosas que pasan y se entienden perfectamente. Pero si esto hubiera ocurrido con una máquina Windows (Windows, Windows, Windows, Windows) la conclusión estaría clara, y no sería esa que acabo de decir.
En fin, que estuvo muy interesante, que felicito a Asturlinux y que espero que sigan trabajando por mucho tiempo (y que pierdan el miedo a decir Windows).