Cómo formar delincuentes
El otro día fui a ver un concierto de violín/viola y piano (María Ovín Carrera, Jesús Rodríguez González, acompañados por Mario Bernardo) a la iglesia de Santa Eulalia de Luarca (bonito interior, por cierto). Y como se habían acabado los programas (lo que sonó fue una música maravillosa de Franck y luego una más inquietante de Shostakóvich) me entretuve leyendo la hoja parroquial. Y había un artículo titulado "Cómo formar delincuentes". Y ponía más o menos esto (algunos los dejo en blanco, que los comentaré después):
1- Comience desde la infancia dando a su hijo todo lo que pida. Así crecerá convencido de que todo el mundo le pertenece.Claro, son "ejemplos en negativo"; se supone que si uno hace esto, formará un delincuente. Eso es un poco exagerado, pero en fin, suponiendo que un delincuente sea básicamente alguien que no distingue el bien del mal, ciertamente esas pautas de "educación" no ayudarían a uno a aprender la diferencia. Así que la hipérbole podría servir.
2- [...]
3- Cuando diga palabrotas, ¡ríaselas! Esto le animará a hacer más cosas "graciosas".
4- No le reprenda nunca ni le diga que está mal algo que hace. Puede crearle complejos de culpabilidad.
5- Recoja todo lo que él deja tirado... ¡hágaselo todo! Así se acostumbrará a cargar la responsabilidad sobre los demás.
6- [...]
7- [...]
8- Dele todo el dinero que quiera gastar. No vaya a pensar que para disponer de dinero es necesario trabajar.
Con esas que he puesto ahí estoy bastante de acuerdo. Tristemente estos "ejemplos en negativo" reflejan un comportamiento insólito en unos progenitores, pero me temo que muy extendido en la sociedad actual.
Luego, había algunos puntos más llamativos, que me apetecía comentar. Por ejemplo, el 7:
7- Riña a menudo con su pareja en presencia de su hijo. Así no se sorprenderá ni le dolerá demasiado el día en que la familia se rompa.Esto no lo veo tan claro. ¿Cuál sería el mandato en positivo? ¿Riña con su pareja a escondidas, para que su hijo no se entere de nada? Tengo mis dudas. ¿No riña con su pareja? Pero si es esto último, ¿no se sale un tanto de la cuestión formativa? ¿Acaso una pareja que se rompe forma delincuentes? Yo creo que una pareja rota de puertas adentro, que no riñe en presencia de sus hijos, no es mucho mejor que una pareja rota de forma civilizada... El 7 lo veo confuso.
Otro:
6- Déjele leer todo lo que caiga en sus manos. Cuide de que sus platos, cubiertos y vasos estén esterilizados. Pero deje que su mente se llene de basura.Estoy de acuerdo en que un niño, sobre todo un niño pequeño, no tiene por qué leer ciertas cosas, y que sus padres tienen una clara responsabilidad (es de esperar que decreciente con el paso del tiempo) sobre lo que lee o ve. Pero cuando es la Iglesia la que pide limitaciones a la lectura me pone los pelos de punta, dados los precedentes. ¿A qué considerarán ellos "basura"? Supongo que no se refieren al Antiguo Testamento, y que consideran esa una lectura adecuada para un niño. Sin embargo, la Iglesia ha considerado "basura" que ni siquiera los adultos deberían leer a Rabelais, Descartes, Montesquieu, Copérnico, Kepler, Zola, Balzac, Hugo, Montaigne, Beccaria, Bentham... Vamos, muchos de los autores que este humilde bloguista leyó para entender mejor el mundo, y muchos que tiene pendiende leer.
Sin embargo, la que me dejó noqueado fue la que colocan en un lugar preferente, como punto número 2:
2- No le dé ninguna educación religiosa. Espere a que alcance la mayoría de edad y pueda decidir libremente.Debe colegirse que si a un niño no le das educación religiosa desde pequeño, antes de que pueda decidir libremente, lo estás convirtiendo en un delincuente. A mí me parece más bien que el comportamiento delictivo es coger un niño de corta edad y llenarle la cabeza de ideas irracionales ante las que no tiene ninguna defensa mental, porque es un adulto quien se las transmite como dogma absoluto; ideas que en gran medida se basan en la superstición, el miedo al castigo, la culpa, que toman la forma de metáforas confusas que casi nunca se acepta explícitamente que son metáforas... y que se imprimen en su vulnerable mente, con mucha más fuerza que cualquier otra cosa.
Cuando uno lee de pequeño sobre un asesinato, no piensa inmediatamente que el asesinato sea algo bueno o normal; de hecho, es raro que una obra literaria haga apología del asesinato. Pero la religión se presenta a sí misma como la verdad absoluta, se rodea de amenazas y de coacciones, y de mecanismos de autorrefuerzo, como la idea misma de la "fe" como virtud.
Bueno, ya sabéis, chavales. No déis a vuestros pequeños una educación laica, ni les enseñéis ética ni les dejéis leer a Montaigne; porque esos, de mayores, son delincuentes.
Toma castaña.
2 comentarios:
Ojalá se preocuparan tanto del futuro de los niños cuando éstos son violados por algunos de sus compañeros con sotana.
Qué caña!!!
Podría escribirles yo un Tratado sobre como incentivar al futuro delincuente desde las aulas particulares que los dejaría de piedra,y eso sin mencionar -mucho-las ideas religiosas.
Éso si,la mi fía,por lo que leo,va por el mal camino...la apunté a religión este curso porque "se aburre" en la asignatura alternativa (no hacer nada)
Bendita educación pública.
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