Texto en español Dragó y la idiotez

Desconozco si todos los lectores de Dragó son idiotas; supongo que no. En realidad, no tengo muchos elementos de juicio porque sólo conozco un posible lector de Dragó (y no sé si lo es en realidad): Ana Botella, a quien en este vídeo vemos con Dragó en un maratón de rosca mutua y en el que se ve cómo Dragó y Botella asumen con toda naturalidad que el último libro de Dragó no lo escribió Dragó, que es un escritor tan peculiar que no tiene tiempo para escribir.
Sin embargo, estoy seguro de que no todos los lectores de El Mundo son idiotas, porque conozco al menos a uno: yo. Pero supongo que hay muchos más. Vamos, supongo que son mayoría, una mayoría abrumadora, la práctica totalidad de los lectores de El Mundo, los que no son idiotas.

Por eso supongo que el motivo de que la noticia más leída de El Mundo durante varios días fuese esta:

 Padre a los 75 con 70 pastillas diarias - Fernando Sánchez-Dragó desgrana su 'elixir de la eterna juventud'

obedece a una verdadera oleada de indignación, abucheo y reprobación. Lo hemos leído para ver qué chorradas dice.

Supongo que los lectores de El Mundo se han dado cuenta de que eso no es una noticia, ni información, ni nada que se parezca a periodismo.

Supongo que se han dado cuenta de que por otra parte eso de que Dragó se toma setenta pastillas al día o que lleva una maleta aparte sólo para las pastillas es una mentira como una casa de grande.

Supongo que no creen que Dragó sea en realidad tan idiota como puede llegar a parecer.

Supongo que saben que si te tomas 70 pastillas al día, definitivamente no tienes 20 años, ni te sientes como alguien de 20 años (es francamente raro el caso de veinteañeros que se toman 70 pastillas al día, incluso contando a los amigos de Pocholo).

Supongo que han caído en la cuenta de que eso que tiene formato de noticia es un puro anuncio el que Dragó, a costa de decir memeces y hacer payasadas, intenta vender el negocio de su mujer, ese negocio que probablemente debería estar cerrado por una docena de motivos.

Pero a pesar de la agudeza de los inteligentes lectores de El Mundo (a quienes seguro que no ha engañado esa farsa de anuncio disfrazado de noticia) hay que reconocer que probablemente el negocio de esa señora vaya viento en popa. Vivimos en un país en el que las farmacias son negocios regulados de forma estricta, y sin embargo en muchos de sus escaparates y rótulos podemos ver, al lado de la palabra "farmacia", la palabra "homeopatía". Y nadie se escandaliza.

Así que no es extraño que Dragó siga escribiendo y hablando en público, y tenga lectores y oyentes.

 

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Es Off Topic total.. pero estaba leyendo esto y me acorde de ti, por si no lo habias leido

http://www.abc.es/20120611/archivo/abci-charlie-parker-gillespie-jazz-201206081954.html

M

Guti dijo...

Bienvenido, con offtopics y todo :-)

Pues no lo había leído, aunque ahora me suena haber oído la historia alguna vez.

Como todas las historias demasiado novelescas, parece que no es cierta del todo. Eso de "saxofón de plástico" suena a juguete, pero no; al parecer es un saxo alto de verdad, un saxo Grafton. Fue un experimento con ciertos materiales, dicen que porque después de la guerra no había mucho latón disponible (puede ser). Y el saxo suena, aquí tienes a un tipo tocando ese "saxo de plástico": http://www.youtube.com/watch?v=MjY1NPUUp9U

Por otra parte, al parecer Parker experimentaba con esa marca y material, no es sólo que ese día se lo prestaran de improviso.

Guti dijo...

Una cosa más: hoy en día se venden "saxos de plástico", y no cuestan como un Selmer, pero vamos, que son instrumentos relativamente serios:

http://www.sax.co.uk/acatalog/Vibrato_Polycarbonate_Saxophones.html